La anemia aumenta de 43.6% a 46.6% en un año. Tres de cada cuatro niños son anémicos en Puno. Más de un millón tienen anemia a pesar de que presupuesto para combatirla aumentó 86% entre 2009 y 2018.
La anemia infantil ha aumentado de 43.6% a 46.6% entre el 2017 y el 2018. Tres de cada cuatro niños son anémicos en Puno. En once regiones más de la mitad de los niños padecen anemia. Peor aún, entre 2013 y 2017 el porcentaje de gestantes con anemia ha pasado de 12% a 21%. Más de un millón de niños menores a 5 años tienen anemia. ¿Por qué aumenta la anemia si el presupuesto público para combatirla se ha incrementado en 86% entre el 2009 y el 2018?Según datos del Instituto Nacional de Estadística e Informática (INEI), la fracción de niños de 6 a 36 meses con anemia ha aumentado de 43.6% a 46.6% entre el 2017 y el 2018 (ver goo.gl/Ld2EBf). En Lima, la anemia se ha incrementado en 8 puntos porcentuales desde 33% a 41%. La anemia ha aumentado en la costa, de 36.1% a 42%, y en la sierra, de 52% a 54.2%, mientras que se ha reducido en la selva de 53.6% a 48.8%. La anemia ha aumentado en las zonas urbanas, en que ha pasado de 40% a 44.7%, pero se ha reducido en el ámbito rural de 53.3% a 51.9%. Entre las madres que no tienen secundaria la incidencia de la anemia llega al 55%.
En once regiones, como Cusco, Loreto, Junín, Huancavelica y Madre de Dios, más de la mitad de los niños menores a 3 años son anémicos. En Puno, la prevalencia de la anemia supera el 75%. Peor aún, entre el 2013 y el 2017 la proporción de gestantes con anemia se incrementó de 12% a 21% (ver goo.gl/MdorqF). Uno de cada tres niños menores a 5 años padece de anemia. Ello implica que hay más de un millón de niños menores a 5 años con anemia. De acuerdo con datos del Banco Mundial, Perú es el segundo país con mayor prevalencia de anemia en América del Sur después de Bolivia (ver goo.gl/bMvsxM).
Entre el 2007 y el 2011 la anemia infantil tuvo una tendencia decreciente. Así, pasó de 56.8% a 41.6%: una caída de 15 puntos porcentuales. Pero, desde el 2011 la anemia tiene una tendencia creciente. Durante la administración de Ollanta Humala la anemia infantil se incrementó en dos puntos porcentuales y llegó a 43.6% el 2016. En el breve gobierno de Pedro Pablo Kuczynski la prevalencia de la anemia siguió en ascenso hasta ubicarse en el 46.6% actual.
El presupuesto del Programa Estratégico Presupuestal Articulado Nutricional (PAN), que tiene como uno de sus principales objetivos la reducción de la anemia infantil, pasó de 1,052 millones en 2009 a 1,957 millones el 2018. ¿Qué explica entonces que la anemia infantil haya aumentado en los últimos años si los recursos públicos asignados a combatirla se incrementaron en 86% entre 2009 y 2018? Los funcionarios, presentes y pasados, del Ministerio de Inclusión y Desarrollo Social y del Ministerio de Salud deben explicarnos a los ciudadanos por qué la lucha contra la anemia ha sido un rotundo fracaso desde 2011.
La principal razón de la anemia es la deficiencia de hierro. La anemia reduce la esperanza de vida, aumenta la morbilidad, y merma el desarrollo intelectual. Tener niños anémicos hoy significa que mañana tendremos adultos poco inteligentes, enfermizos e improductivos. Jay Ross y Susan Horton estudiaron las consecuencias económicas de la deficiencia de hierro (ver goo.gl/PqDg2F). Según sus estimaciones, el valor presente de las pérdidas que ocasiona la anemia serían mayores al 4% del producto nacional. En el caso del Perú, ello implica que la anemia ocasiona una pérdida de más de USD 8,000 millones a la sociedad.
En Chile, la anemia entre los niños de 11 a 18 meses se redujo de 27% a 9% en un año (ver goo.gl/Avspe1) gracias a un programa de fortificación de la leche con hierro. Venezuela, Costa Rica, Filipinas y Brasil, entre otros países, han tenido éxito en reducir drásticamente la anemia infantil con programas similares de fortificación de los alimentos con hierro. El costo de estos programas ha sido inferior a 0.1% del producto nacional. (ver, por ejemplo, goo.gl/ixPiqK). ¿Podrían quizás nuestras autoridades hacer lo mismo que hicieron otros países para reducir la anemia en lugar de seguir malgastando los recursos públicos?
Durante los gobiernos de Humala y Kuczynski, la anemia infantil se incrementó de 41.6% a 46.6%. La administración de Martín Vizcarra está en la obligación de enmendar el lamentable rumbo de sus predecesores.
Juan Mendoza, 26 de agosto de 2018.